sábado, 13 de setiembre de 2008

Un fin instrumental

Este fin de semana, me paso algo que no me ocurria hace mucho tiempo, queria vivir conmigo. Nombre este estado de ánimo "asocializado", sin ganas de socializar, no sé si esté bien nombrado, la verdad, no me importa, nunca me importó. Este fin de semana que aún no concluye, siento que los amigos y la familia no son como yo lo pensaba, me doy cuenta de muchas cosas con las que convivia y recapacito en otras que hacía. Este es un raro fin de semana, no tengo ganas de pensar en lo que normalmente pienso, no tengo ganas de gastar fuerzas en cosas que creo que algún día lograré, no tengo ganas de tener ganas de nada.

Hace mucho tiempo que no me sentía tan bien escribiendo, hace tiempo que no me sentía sin obligación en escribir mientras lo hacía, hace que no escribia para mí mismo, hace tiempo que no me ponía en el lugar de un lector ajeno y pensaba en quién escribía lo que escribía. En algún lugar leí que alguien sostenía la hipótesis de que la inspiración no existe, cuando lo escuche estuve en total desacuerdo con ello, y ahora, que lo pienso mejor, sigo estando en desacuerdo. Quizás no todas las personas se inspiren de igual manera o con lo mismo, quizás algunas nunca se inspiren o algunas otras vivan en constante inspiración, me gustaría ser de las últimas, todo sería mejor. Por el momento creo que descubrí una nueva fuente de inspiración y, de hecho, muy efectiva.

Hace dos días decidí descargar por torrent una discografía completa. A veces soy una personas muy insegura para tomar desiciones intrascendentales, y esta fue una de esas ocasiones, al final decidí descargar la de Fool´s Garden, un grupo interesante. Cuando ya estaba avanzada la descarga me di cuenta que el grupo no era Fool´s Garden sino Secret Garden, un error de la página donde bajé el torrent. No quise parar la descarga para ver de que se trataba, ahora recién la escucho. Creo que descubrí una nueva fuente de inspiración y, de hecho, muy efectiva. Instrumental y relajante, profunda y misteriosa, quizás todo esto suene muy cursi, no es mi linea, pero para mí todavia las lineas que trato de escribir no pierden realidad.

No se que me pasó este fin de semana, si el que cambia soy yo o los demás. No soy un adolescente resentido con la vida, no tengo tiempo ni espacio para gastarlo es estupideces, tampoco creo ser una persona madura que ya conoce la vida, porque solo tengo 18 años y menos de una cuarto. Más allá de eso, no me interesa ser ninguna de las dos, lo único que quiero por ahora es que este minuto dure eternamente y que ningún sonido irrumpa con la paz y la concentración que esta música deposita en mí. Lo que viene después que alguna situación misteriosa me lo cuente luego; por ahora, dejenme ser, estar y vivir. Gracias

viernes, 12 de setiembre de 2008

La ingenioidad de un peruano trabajador

Muchas veces nosotros mismos nos sorprendemos de lo que un peruano puede llegar a hacer para ganar dinero. Felizmente puedo decir que la oración anterior esta cargada de positivismo y no debe ser mal interpretada. Aunque, como en todos los rincones del mundo, aquí también hay gente de mal vivir, el motivo de este post no es describirlos a ellos, sino a la que usa el ingenio para (sobrevivir es muy sarcástico) vivir.

Muchos dicen que lo más característico de un peruano es su inteligencia para inventarse un trabajo, no sé si suene muy nacionalista, no he vivido en otros países como para afirmarlo o negarlo, pero si creo que es una característica distintiva.

Me acuerdo un día no muy lejano, caminando por una concurrida calle comercial del centro de Lima con mi papá, que tomé atención a la gente que caminaba por la cuadra y comencé a pensar en toda la gente que estaba trabajando ahí ahora: gente que cargaba paquetes de una lado a otro, gente que vendía en su negocio, gente que jalaba gente a su negocio, gente que vendía comida, ambulantes, policía, etc. Decidí preguntarle a mi padre: ¿Pa, cuantos tipos de trabajo hay en esta cuadra? a lo que me respondió: La mayoría de los que trabajan cerca siempre se dedican a lo mismo, hijo. Todavía no entiendo por qué, pero de mi boca salieron unas palabras con sonido a: "qué pena que no me captaste"... No sé si no me escucho o prefirió hacer como el padre de Mafalda, pero ahí concluyo la efímera conversación

Para comenzar con los ejemplos, quiero utilizar uno que me impacto hace unos 2 años. En el centro de Lima, al iniciar el Sanjón, estaba parado en un semáforo con mi padre esperando la luz verde y a los lejos vi algo muy interesante e impresionante, si cabe el término. Un hombre subido en zancos estaba limpiando la luna de los autobuses, esto me dejo pensando más de dos horas, tratando de entender porque esta persona hacia lo que hacia y de dónde sacó la idea. Si lo vemos por el lado productivo, no tenia competencia, a esas lunas no llega una personas normal ni aunque fuera alta. Técnicamente, el trabajo era perfecto.
Otra hazaña insólita, a la que quizá estemos acostumbrados en Lima, es el hecho de ver a gente que se sube a los micros a cantar y tocar algunas canciones. De hecho, hay muchos desubicados que cantan malísimo y suben a malograrle el no muy placentero viaje a la gente, pero hay otros, principalmente jóvenes inmigrantes, que con un par de instrumentos rústicos son capaces de captar la atención de más de 20 personas no muy dispuestas a tomarle atención a un extraño. Sobretodo sale bien cuando estas canciones son amazónicas y no han sido maltratadas por la sociedad excluyente limeña.
Hablar de esto y no nombrar los semáforos sería prácticamente un crimen. ¿Alguna vez se han puesto a pensar cuantos trabajos diferentes hay en los semáforos limeños? Hasta ahora fácilmente he visto unos 30 diferentes, entre los más representativos están los clásicos malabares con fuego; bailes lunáticos con disfraces plateados creados por los mismos actores; los saltos temerarios entre dos que muchas veces incluyen break dance; jóvenes con narices rojas que intentan sacarle sonrisas a la gente poniéndose un máscara blanca de pintura, quizás para poder trabajar felices; pequeñas niñas con coreografía, que crean en ti la duda entre apoyar a la explotación infantil o generar violencia infantil (inevitablemente es muy probable que siempre estén presentes estas posibilidades).
La comida ambulante rechazada por algunos y amada por otros. Personalmente no tengo nada en contra, pero desde que me dio hepatitis mi madre me prohibió comer algo de la calle y quede traumatizado. Si la comida peruana es variada, las cosas que puedes encontrar en la calle son más. Desde yuquitas fritas de todos los tipos y sabores, pasando por popcorn, maní confitado, habitas, maní salado, panes con todo lo que exista a todos los precios, hasta llegar a comidas más comprometedoras y temerarias como el ceviche de carretilla.

Actualmente han aparecido nuevos trabajos, quizás el más conocido es el de las llamadas de 50 céntimos, pensándolo bien creo que son demasiado útiles, por eso lograron expandirse rápidamente por todo el país, incluyendo Arequipa, Tacna, Ica y quién sabe donde más.

Infinidad de trabajos pueden existir y faltan crearse, algunos se crean por épocas como vender flores en la quincena de Febrero o vender parafernalia del Señor de los Milagros en la época de este. De hecho el tema de la convocatoria "religiosa" también es bastante interesante y sería bueno tomarlo en cuenta en otro post ya que nuestro país es una de las potencias en juntar gente para estos fines.
Sin más que decir espero haber hecho un buen trabajo sobre este tema tan interesante que no me gustaría maltratar con malas publicaciones. Gracias y gracias Webo.

domingo, 7 de setiembre de 2008

La importancia de llamarse Viviano


¿Cual es la razón del título?, ¿Quién demonios es Viviano?, ¿Qué demonios estoy leyendo? Muchas preguntas se te pueden venir a la cabeza al leer estas líneas, yo te las responderé. Primero, la razón del titulo es un comentario de Luciano hace mucho tiempo en un post que se llamaba "recomendaciones", que dicho sea de paso es el que más comentarios tiene, creo. Bueno nunca le hice caso a ninguno y pensé que era hora de escribir sobre este tema, ya que mis amigos de la universidad hace poco se enteraron de mi desgracia y Luciano me dice que escriba algo en el blog. Segundo, quién demonios es Viviano, pues Viviano soy yo (Eso suena terriblemente homosexual, pero qué puedo hacer). Tercero, qué demonios estas leyendo, mi blog.

Ahora que todas tus dudas han sido aclaradas, quiero comenzar a abordar el tema desde mi experiencia universitaria. Todo comenzó cuando estábamos en el carro de Talia y deje mi mochila mientras iba a comprar, entonces Juempe sacó mi billetera y le mostró a los presentes mis carnés con mi segundo nombre, aquí inicia mi suplicio. El viernes en la rotonda de letras, momentos después de lo sucedido en el carro de Talia, estaba contando porqué y cómo me pusieron este nombre. Explicaba que el mejor amigo de mi papá en esos tiempos era italiano y se llamaba Viviano y esa fue la razón, pero mi madre no estaba de acuerdo y acordó con mi padre que me iba a llamar Augusto Alonso. Mi padre se negó a ponerme así porque dijo que me iban a decir "Alonso sonso", entonces surgió un desatinado comentario de Vane.

Yo: Mi papá no quería ponerme Alonso porque decía que se iban a burlar de mí.
Vane: ¿Qué y con Viviano no?

Después de 15 minutos escuchando risas burlescas y tratando de olvidar lo sucedido, seguí contando que mi padre me fue a inscribir y se zurró en la opinión de mi mamá y me puso Viviano y cuando mi mamá se entero preguntó mortificada casi desvaneciéndose: ¿Qué dice acá?! o algo así, es un poco difícil recordarlo.

Eso fue el porqué de mi nombre, ahora las consecuencias que ha traído son trágicas: La primera y quizás más importante que me digan Vivi en el colegio por mucho tiempo y no tenga armas para defenderme; la segunda que Sandra diga que tengo cara de Viviano (por dios si alguien tiene cara de Viviano es Boy George); la tercera, la hipótesis errada de Juempe de que mi padre es gay; la cuarta es la constante burla de la gente que se entera cuál es mi segundo nombre; la quinta, que nunca puedo escribir mi nombre completo en mis exámenes ni en formularios de datos personales así diga "nombres completos" por temor a la burla del profesor; la última que recuerdo (porque de hecho hay muchas más) y la más reciente es el afán de Talia y Juempe, y ahora Angela, de llamarme Vivi aunque yo les diga, por experiencia propia, de que ese nombre, apodo o lo que sea, no se pega y van a terminar llamándome Augusto nuevamente.

Por otro lado, hay veces en las que me siento Viviano, por ejemplo, ayer. La selección peruana es despreciable, pues así gane o pierda igual me caga la noche. Apostamos que si ganaba yo me pintaba los ojos de negro y Juempe se laceaba el pelo y como todos sabemos eso ocurrió. Ahí sí que me sentí Viviano, los taxis no paraban al ver mis ojos pintados de negro y mis amigos me gritaban: "Augusto, tu no pares los taxis, por favor!!". Además de eso, a la fuerza, tuve que ir a Sargento, aburridísimo bar sabatino juvenil, donde esta la mitad de la Pucp y la gente me miraba muy extrañamente, pero mucha gente y muy extrañamente.

Para terminar algunos datos adicionales para que no les pase por la cabeza ponerle a su hijo Viviano de segundo nombre. Siempre, siempre en todas las listas, sale Vivi o Vivian, nunca sale el nombre completo. Quizás esto es una de las mayores desventajas, pues cuando los compañeros ven las listas solo tengo que agachar la cabeza y no entrar en discusión. Además cuando toman la lista siempre ruegas que no digan tu segundo nombre y te vuelves extremadamente católico segundos antes de que la profesora llegue a tu nombre. Como último dato a veces en los carné, ya sea universitario, de biblioteca, o seguro más que todo, aparece Vivian como segundo nombre y eso si es gravísimo porque los médicos se niegan a atenderte en emergencias, mientras se ríen.

Bueno, consiente de que llamarse Viviano no tiene ninguna importancia y que le titulo del post esta de más, debiendose llamar "lo perjudicial de llamarse Viviano", concluyo esto cabizbajo y sintiendo que revelé un gran secreto.

PostData: Si están pensando que mis padres no me quieres, deberían de leer un par de post anteriores llamados "Historia de un insólito nacimiento" y "Diecisiete años de bastardo" del mes del Junio del 2007 para terminar de convencerse. Ambos guardan relación entre sí y con este tercero, y los títulos son explícitos no metáforas (especialmente el bastardo = no reconocido por sus padres).